Los lagos de Covadonga es uno de esos sitios que hay que visitar, tanto por nivel cultural como natural y os voy a explicar el por que, además de como siempre, poneros fotos y un vídeo…
Este sitio tiene un valor histórico muy importante, ya que se entiende que es el lugar donde comienza la Reconquista española a partir del rey Don Pelayo.
Es por esta razón que muchos seguidores de algunas corrientes políticas lo consideran como un santuario que hay que visitar por creencias y bla bla bla.
No me malinterpretéis lo respeto pero no lo comparto, para mi este lugar en lo que a la basílica y la ermita se refiere tiene un nivel histórico y arquitectónico importante, además de ser un sitio precioso, pero no lo veo como un lugar de peregrinación política.
Pero bueno, entremos en materia…
¿Cómo llegar a los Lagos de Covadonga?
Llegar a los lagos en tu propio vehículo es posible pero hay que tener cuidado ya que puedes encontrar la barrera que da acceso a la carretera cerrada y no poder pasar, por ello lo mejor es ir en autobús.
Para subir tanto a los Lagos de Covadonga como a la basílica, hay cuatro parkins desde Cangas de Onís donde poder dejar el coche y por nueve euros poder tomar el bus de ALSA.
Nota: Recuerda que si esta activo el protocolo covid tienes que llevar una mascarilla o te quedarás en tierra. Yo tuve que pedir una a las personas que hacían cola y una pareja muy amable me la dejo. (Gracias)
Con este billete se llega por una carretera bastante estrecha y sinuosa hasta los lagos, de hecho hay personas que lo pasan bastante mal en el trayecto, en el cual los autobuses se comunican para poder pasar por algunas zonas donde no pueden subir y bajar a la vez.
Una vez que ya hemos llegado a los Lagos y hemos disfrutado de ellos, se toma de nuevo el bus y se puede bajar en la parada de la basílica con el mismo billete, así que no lo perdáis.
Y finalmente se puede tomar de nuevo el autobús para bajar hasta el parking donde hayas dejado tu vehiculo.
De este modo por nueve euros puedes subir y bajar, pasar el día en la zona y olvidarte de la carretera tan chunga que hay en frente, bajo la tutela de unos conductores que tienen mucha experiencia.
Los Lagos de Covadonga
Cuando llegamos a los Lagos nos recibió una trabajadora contándonos las normas del parque natural.
- Seguir los caminos
- No molestar a los animales (aunque a la gente le da igual, en mi visita había una ternerita que estaba acorralada contra el lago de la Ercina por los visitantes y sus mugidos hicieron aparecer a la madre, con la que la gente ya no era tan valiente. Por fortuna la muchedumbre se apartó y dejo que se reunieran)
- No arrojar basura, cosa que aunque a grandes rasgos se cumple, hay multitud de micro basuras, como papeles de chicles, caramelos, colillas… de modo que seamos cívicos y no ensuciemos estos parajes tan espectaculares.
A partir de ese momento puedes moverte siguiendo las diferentes rutas que hay en la zona, y disfrutar del contraste de colores, la naturaleza y del paseo que es algo realmente mágico.
El Santuario de Covadonga
Volviendo en el autobús nos bajamos en Covadonga, presidiendo todo el valle la basílica te hace sentir un poco pequeño pero es un panorama precioso.
A los pies de la colina donde está dicha basílica se encuentran los bares, restaurantes, tiendecillas… de hecho nosotros comimos allí y me compre mi imán del viaje.
Justo a la izquierda de la carretera se encuentra la cascada y la ermita de Covadonga donde reposa la virgen y que es una de las fotos más típicas de la zona.
Subiendo una escalinata hasta la ermita se puede pasar por un túnel que nos lleva hasta la explanada donde se encuentra la zona administrativa y la basílica que parte de su arquitectura tiene unas vistas espectaculares.
Si se investiga un poco la zona se puede descender hasta un arroyo y sentarse allí en unas rocas a escuchar el agua, refugiarse del calor y descansar o meditar un rato.
Conclusiones
Para mi esta era una visita que tenía muchas ganas de hacer, quería disfrutar de las vistas, de la naturaleza, de las montañas y finalmente de la historia y la arquitectura.
Y de hecho lo hice todo, incluso me comí un cachopo y unas fabes (acompañado, claro).
La ruta de los lagos es muy sencilla y no tiene peligro por lo que puede ser interesante hacerla con niños e ir introduciéndolos en el senderismo en un lugar privilegiado.
Este fue uno de los checks que hice en mi lista de cosas que quiero ver o hacer de modo que me quedé muy satisfecho.
¿Y vosotros?¿habéis estado en los Lagos de Covadonga?
